domingo, 28 de febrero de 2010

La invasión de los "Jellies" chinos

Desde hace más o menos dos años, han estado entrando a nuestro país (por vías legales y no tan legales) miles de pares de calzado plástico hechos en China, en todos los estilos imaginables y moldeados con plástico de todos los colores del arcoiris. Lo que en un principio inició como una discreta invasión de copias y clones de los famosos Crocs (o infames, dependiendo de su punto de vista), ahora se ha convertido en una inagotable cascada de calzado plástico, moldeado tanto en PVC como en EVA, con una interminable variedad de modelos para damas, caballeros, niños, niñas y sorprendentemente hasta para bebés. Si bien siempre se habían vendido sencillas sandalias y chancletas de baño de procedencia asiática en México, nunca antes como ahora se había vuelto tan patente su abundancia y permanencia en el mercado nacional.

Enfocándonos en los estilos de "Jelly Shoes" para dama y niña (especialmente los flats y sandalias), estos pueden ser fácilmente adquiridos en cualquier mercado sobre ruedas o inclusive hasta en zapaterías de precios populares, y aunque muchos de los estilos son copias descaradas de los diseños de marcas como Marc Jacobs, Melissa, Vivienne Westwood y Chanel, muchos otros se presentan como variantes muy originales que llaman la atención por su diseño y colorido. Aquí hay algunas de las muestras de los jellies chinos que se pueden comprar en cualquier tianguis de México:


Además de estos modelos, hay una gran variedad de diseños de zapatos tipo flats, sandalias de piso o de tacón, chancletas y hasta botas para lluvia cuyos precios van de los 20 pesos por un par de sandalias sencillas, hasta 70 pesos por vistosos zapatos con plantillas acolchadas e incrustaciones de cristal sintético en la parte frontal del calzado.

Por una parte es triste que la industria mexicana haya reaccionado de una manera tan tibia y poco atractiva ante el renacimiento de la moda de los jellies (tanto Windy's como Sandak han estado lanzando poco a poco modelos que pretenden reconquistar la preferencia del público femenino, aunque con muy poca difusión y diseños muy convencionales), pero por otro lado es muy grato ver que más niñas, jovencitas y mujeres se vuelcan a las tiendas de calzado y a los tianguis para comprar un par de jelly shoes y así estar a la moda. Nuevamente las calles de México se llenan de colorido, y con la Primavera a la vuelta de la esquina, es muy probable que vivamos una época muy parecida a la que vivimos hace ya 25 años, cuando los Windy's eran los reyes indiscutibles del calzado.